A la vez que crece nuestra fe, también tiende a crecer nuestra sensación de desvalimiento, de modo que puede parecer que una persona que cree mucho, al mismo tiempo, en sentido impropio, duda más que nunca. Esto no es, en modo alguno, un indicio de duda teológica, sino únicamente la conciencia perfectamente normal de la inseguridad natural y de la angustia que la acompaña. Thomas Merton OSB. Nuevas semillas de contemplación

Comentarios

Entradas populares de este blog

La alegría