En la paz del corazón se disipan las inquietudes sobre ti mismo. Lo más importante para ti es descubrir que Dios te ama. Y su amor es presencia y perdón. Es porque su perdón irradia confianza en que la paz del corazón es posible y hasta cierta. El te ama incluso si tú piensas en no amarle. Y vendrá un día en que tú le dirás: te amo, quizá no como yo quisiera, pero te amo. Frère Roger de Taizé. Cartas de Taizé

Comentarios

Entradas populares de este blog

La alegría