Si nos mantenemos libres de las cosas que se hallan fuera de nosotros, Dios nos quiere dar, en cambio, todo cuanto hay en el cielo y el cielo mismo con todo su poder, ah sí, y todo cuanto de él alguna vez ha emanado y lo que tienen todos los ángeles y santos para que sea tan nuestro como es de ellos, y aún más de lo que me pertenece cualquier cosa. A cambio de que yo, por amor de Él, salga de mí mismo, Dios me pertenecerá totalmente con todo cuanto es y puede ofrecer, [me pertenecerá] tanto a mí como a sí mismo, ni más ni menos. Me pertenecerá mil veces más de lo que jamás un hombre cualquiera haya obtenido, guardándolo en el arca, o de lo que se haya poseído a sí mismo. Nunca cosa alguna nos ha pertenecido tanto como Dios será mío con todo cuanto puede y es. Tratados y sermones. Maestro Eckhart

Comentarios

Entradas populares de este blog

La alegría