Es peligroso ir a la soledad únicamente por el gusto de estar a solas. La persona que se encierra en su esfera privada con su egoísmo se pone en una situación en la que el mal que hay dentro de ella la poseerá como un demonio o hará que pierde la razón. Pero podemos estar perfectamente fuera del mundo, aún permaneciendo en medio de él, si dejamos que Dios nos libre de nuestro egoísmo y vivimos sólo para el amor. Thomas Merton OSB. Nuevas semillas de contemplación

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