Y cuando el llanto...

Y cuando el llanto me agota y me conduce al borde de la muerte y, sin socorro alguno, me encuentro suspendido sobre el abismo de tinieblas, entonces, de modo inexplicable, un suave soplo de amor llega de otro mundo, acompañado por la luz.

La Oración, experiencia de eternidad. Archimandrita Sophrony

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