Y en todas sus obras

Y en todas sus obras y en todas las cosas el hombre ha de usar atentamente su entendimiento y en todas ellas debe tener inteligente conciencia de sí mismo y de su interioridad y aprehender a Dios en todas las cosas de la manera más sublime que sea posible. Pues, el ser humano debe ser tal como dijo Nuestro Señor: «¡Habéis de ser semejantes a hombres que a toda hora están despiertos y esperan a su señor!» (Lucas 12, 36). A fe mía, la gente que espera así, está alerta y mira alrededor suyo [para ver] de dónde viene aquel a quien están esperando y lo aguardan en todo cuanto suceda por extraño que les resulte, [pensando] si acaso no se halla ahí. Nosotros debemos, de la misma manera, mirar conscientemente todas las cosas por [si se esconde en ellas] Nuestro Señor. Necesariamente hace falta mucha diligencia para tal [empeño], y uno no debe ahorrar gastos, dando todo cuanto puedan rendir los sentidos y potencias. Al proceder así, la gente estará bien y aprehenderán a Dios de igual modo en todas las cosas y siempre encontrarán en ellas a Dios en la misma medida.

Maestro Eckhart. Tratados y sermones

Comentarios

Entradas populares de este blog

La alegría