Teodoro y Lucio

Se cuenta de los abades Teodoro y Lucio, ambos de Innatu, que durante 50 años se burlaron de sus pensamientos diciéndose a si mismos: " después de este invierno, nos vamos de aquí ". Luego venía el verano y se decían: " pasado este verano nos marchamos ". Y de este modo se vencieron todo el tiempo estos padres inolvidables (Apo, 298).

Muchos sienten miedo de pensar que han de vivir siempre en el mismo lugar, enseñar siempre en la misma escuela, estar vinculados para siempre a la misma familia. Entonces puede ayudar el decir si a mi situación. Pero un si absoluto tensa a veces demasiado y acentúa el miedo de si seré o no capaz de ello. Entonces podríamos, como esos padres antiguos de Ennatu, contentarnos con decir si solo para el día de hoy. Hoy decimos sí. Mañana podríamos tal vez estar en otra parte. Si no lo queremos todo de una vez, sino que pedimos constantemente fuerza a Dios solo para un día, nuestra vida tendrá más éxito. Los otros pensamientos no hay qué negarlos totalmente. Uno juega incluso con ellos. Pero así les quita su fuerza. El pensamiento vendrá de todos modos. No hay ningún motivo para vencerlo totalmente. Si actuamos de una manera lúdica con ellos, los pensamientos no tendrán poder sobre nosotros. El método de esos ancianos padres nos dispensa de tener que poner de una vez para siempre ante nuestros ojos todas las consecuencias. Entramos en un camino en el que la esperanza de Dios nos guía. Y miramos al siguiente tramo del camino, pero no pensamos siempre en todo en largo y difícil trayecto. 

Anselm Grun OSB. La sabiduría de los padres del desierto


Comentarios

Entradas populares de este blog

La alegría